La excusa para reunirnos y empezar a debatir era el centenario de La España invertebrada (1921) de Ortega. A pesar de que muchos de nosotros nos educamos en la alergia a los “ortegajos”, como llamaba Ferlosio a las expresiones retóricas del viejo maître à penser –Borges habló de las “laboriosas y adventicias metáforas” que obstruían su buen pensamiento–, lo cierto es que la relectura de aquel ensayo propició algunas reflexiones interesantes.
De Andreu Jaume en Cronica Global.
https://cronicaglobal.elespanol.com/pensamiento/vita-activa-en-comillas_504090_102.html