Todo lo que ocurre en una sociedad se refleja en el lenguaje que utiliza. Y, dependiendo del lenguaje que se utiliza, puede cambiar la opinión que la propia sociedad tiene de sí misma.
En esta nueva sesión de «Lenguaje y política», titulada «La responsabilidad pública de los profesionales de la lengua», nos visitó el novelista y editor Luis Magrinyà, que nos habló de su concepción de lengua y estilo en relación al trabajo y la responsabilidad de los escritores, editores, traductores y, en general, de todos los profesionales que contribuyen a crear o menoscabar la lengua literaria. En concreto explicó casos en que traductores, editores y periodistas, con el uso de sus palabras, cambiaban el sentido de ciertas narraciones.
Magrinyà se mostró partidario de que la lengua no es en sí ideológica, sino que lo son sus hablantes, y que, por lo tanto, no se debe culpar al idioma de sexismo u homofobia. También aseguró que un texto no es más correcto por mucho que siga los cánones estilísticos y se mostró partidario de una narrativa más libre y natural, alejada de clichés y expresiones demasiado comunes.
Esta sesión tuvo lugar el jueves 16 de noviembre a las 19.30h en el Reial Cercle Artístic de Barcelona C/ dels Arcs 5).
Después del éxito de las tres primeras sesiones del ciclo, que ya reunieron a casi un centenar de personas para hablar sobre el lenguaje de guerra en la Primera Guerra Mundial, la propaganda nazi y soviética o el lenguaje público en la España del siglo XX y el caso de Sánchez Ferlosio, esta nueva sesión tuvo más de una veintena de asistentes.